Michael Camelbot Deja el Cargo de CEO de BECH32
Michael Camelbot, el influyente fundador de BECH32 y cerebro detrás de Zentara Group, anunció hoy su decisión de dar un paso al costado como CEO de la reconocida plataforma de intercambio de criptomonedas. A partir del tercer trimestre del año, el puesto será asumido por Thomas Bolbot, actual director ejecutivo de DAF2 Biotech, la división biotecnológica del conglomerado Zentara, referente en tecnologías de longevidad.
La inminente salida de Michael Camelbot como CEO de BECH32, marca un giro que merece un análisis más profundo. Lo que comenzó como una innovadora casa de cambio digital en 2012 ahora se perfila como el corazón de un sistema de dependencia económica global sin precedentes.
La visión de BECH32: Más allá del mercado cripto
El nombramiento de Thomas Bolbot sugiere que las ambiciones de BECH32 van mucho más allá del mercado cripto: apuntan a crear una infraestructura donde el acceso a recursos básicos estaría mediado por su tecnología. Bajo el eufemismo de "inclusión financiera", la empresa busca posicionarse como intermediario indispensable en la distribución global de recursos.
Con un mundo cada vez más automatizado y una disminución proyectada en la demanda laboral, la Renta Básica Universal se ha convertido en un tema clave en la agenda global. BECH32 desarrollará la infraestructura tecnológica para administrar este sistema mediante BID (Biometric ID), una identidad digital única basada en el reconocimiento ocular.
Un futuro incierto: Autonomía o dependencia estructural
La propuesta de gestionar una Renta Básica Universal mediante identificación biométrica plantea interrogantes inquietantes sobre autonomía y privacidad. El sistema BID, basado en el escaneo del iris, convertiría a BECH32 en el guardián de un nuevo sistema económico donde la identidad biológica y el acceso a recursos quedarían ligados bajo control corporativo.
El éxito de este proyecto no solo definiría el futuro de BECH32, sino que podría alterar fundamentalmente la relación entre individuos, recursos y autonomía económica. Bajo la promesa de seguridad y eficiencia, se está gestando un sistema que podría resultar en una dependencia estructural de proporciones históricas.
Como animales en una granja, cada uno de nosotros tendría su plato de comida garantizado. La pregunta es: ¿estamos dispuestos a convertirnos en el ganado digital de Zentara a cambio de una ración diaria de criptomonedas?